En aquel tiempo, os discípulos de Juan se le acercan a Jesús, preguntándole:
«¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos a menudo y, en cambio, tus discípulos no ayunan?».
Jesús les dijo:
«¿Es que pueden guardar luto los amigos del esposo, mientras el esposo está con ellos? Llegarán días en que les arrebatarán al esposo, y entonces ayunarán».
Palabra del Señor
Medita:
Tuvo compasión de la multitud porque eran como ovejas sin pastor
¿Qué hacen las ovejas cuando no son atendidas convenientemente por el pastor? Se van a otro corral en donde les presten mayor atención, o se dispersan y se pierden, y terminan siendo presa fácil de los lobos. Jesús al verlos, nos dice Mateo, ‘tuvo compasión de ellos, porque estaban fatigados y abatidos, como ovejas que no tienen pastor’:
- La ‘compasión’ es el sentimiento propio de quien se siente preocupado por la situación de los más débiles y necesitados, especialmente si son cercanos a su afecto… (lo contrario, sería entonces la indiferencia, la indolencia, el abandono…)
- Estaban fatigados y abatidos’, precisamente Jesús comprueba que las gentes que vienen a buscarle, están enfermas, oprimidas y desamparadas por la falta de atención, de cariño, de acompañamiento, de seguimiento.
- ‘Eran como ovejas que no tienen pastor’: sus pastores y responsables (o tal vez ‘pastores irresponsables’), las han abandonado a su suerte, y ellas están dispersas, indefensas, expuestas al peligro, desorientadas, malheridas y enfermas.
Dios, nuestro Padre, es el Patrón y Dueño de la mies, por lo tanto, a Él debemos pedirle que llame, contrate y envíe obreros para que se ocupen de sus ovejas. Los obreros en el Reino de Dios no son solo los sacerdotes y los religiosos; los laicos ejercen también una buena ‘mano de obra’. Y que no se nos olvide el ingrediente principal que caracteriza al ‘Buen Pastor’ en su cuidado de las ovejas: ‘¡La compasión!’ (Jn 10, 14-15)
Ora:
Señor: Yo no puedo, tú sí puedes. Ayúdame.
Te doy mi voluntad. Fortalécela.
Te doy mi cuerpo. Purificalo.
Te doy mi corazón, mi mente y mi espíritu. Santíficalos.
Señor Mío y Dios Mío: Ten compasión de Mí. Ayúdame.
Amén
Actúa:
¿Cómo van a ser evangelizados, sin que nadie les anuncie a Cristo?
¿Y cómo podrán anunciarlo, sin haber sido enviados a evangelizar?
(Rom 10, 14-17)
Cuidar del rebaño de Jesús, ‘buscar a la que está perdida, tornar a la descarriada, curar a la que está herida, confortar a que está enferma y pastorear las ovejas con justicia…’ He ahí la tarea, o como lo pidió el mismo Jesús a sus administradores: ‘que les den el alimento a su debido tiempo.’ (Mt.24, 45-47)
Por: Delegación de la Animación Bíblica de la Pastoral, Arquidiócesis de Cali – Omar Herney Salgado Gómez, Pbro
Nota: Las breves plegarias fueron tomadas del Manual de Oraciones de la Espiritualidad Trinitaria de los Hijos de la Madre de Dios