Por: María Isabel Trujillo Quiroga
Agente de Pastoral Afrocolombiana Arquidiócesis de Cali
Desde la llegada de la llegada de Monseñor Darío de Jesús Monsalve como Arzobispo de la Arquidiócesis de Cali, él hace una opción muy clara por la paz y por la sana convivencia y por los menos favorecidos, esta opción por los últimos, naturalmente lo condujo a priorizar una atención con la población afrodescendiente, esto se convirtió en un plus para el proceso que ya se venía desarrollando desde 1998.
Monseñor Darío le dio una visibilización a la Pastoral Afro a nivel Eclesial y su articulación al Plan Arquidiocesano desde una perspectiva orgánica, de tal manera que ya la Iglesia en Cali se identifica más con este camino pastoral desde la evangelización y naturalmente la promoción humana.
Nuestro Arzobispo dio un paso gigante, cediendo el espacio para el Centro de Pastoral y Espiritualidad afrocolombiana de la Arquidiócesis de Cali, instalaciones en las que antes estaba la antigua Curia Alterna, el conceder este espacio físico a la Pastoral Afro, ha aportado para que nuestra Pastoral tenga más visibilidad y arraigo a este proceso a nivel Eclesial y social.
Monseñor Darío de Jesús, apoyó incondicionalmente liderando el XV Encuentro Continental de Pastoral Afroamericana y caribeña en el año 2018, su liderazgo jugó un papel muy importante para el beneficio de la Pastoral Afro a nivel local, nacional y continental.
En este año hemos contado con la gracia de recibir de su bondad, una nueva casa cedida en Comuneros II, que será un gran punto de apoyo para afianzar la atención de promoción humana, atendiendo así, especialmente una población muy vulnerable, siendo la gran mayoría afrodescendientes.
En su preocupación por el territorio, y su interés por que nos dejemos interpelar por la realidad que afectan las regiones y que también nos involucra como Iglesia, en nuestro caso como pueblos étnicos, Monseñor Darío, ha promovido la articulación de la Pastoral Afro al resto del territorio del Pacífico a través de la Coordinación Regional del Pacífico.
Monseñor Darío de Jesús, nos deja como legado, el gran desafío de dar el paso a la interculturalidad como símbolo y signo de sinodalidad, invitándonos a estrechar las manos de nuestros hermanos los pueblos indígenas, desde lo que se proyecta como una Pastoral Interétnica.
La Pastoral Afrocolombiana de la Arquidiócesis de Cali, se siente orgullosamente, muy bien representados en las distintas manifestaciones y pronunciamientos por la defensa de los Derechos Humanos, procurando por la paz, porque bien lo sabemos la población afro e indígena ha sido bastante flagelada en la construcción de Paz.